lavarse las manos

Expresión coloquial que implica desentenderse de un asunto en el que la persona que lleva adelante la acción podría tener algún tipo de compromiso. La expresión puede reemplazarse por otra, también de tipo coloquial, como “hacerse el boludo”. Curiosamente, en épocas en las que hay que tomar muchas precauciones de higiene personal a causa de una pandemia, el “lavarse las manos” se transforma en un hecho de gran responsabilidad social, por la acepción literal de la expresión. Es decir, la necesidad higiénica de lavarse las manos todo el tiempo y ante cualquier circunstancia. No deja de ser llamativo (por paradójico) el estado en el que vive una sociedad en la que se aconseja, se valora y se incita a “lavarse las manos”. De algún modo, remite al eslogan de otra campaña estatal: “El silencio es salud”. En aquel caso, la campaña apuntaba, teóricamente, a la reducción de contaminación sonora e incitaba a los automovilistas a no tocar las bocinas de sus vehículos. Pero una segunda lectura no muy sutil podía apuntar a acallar voces disidentes, en un momento en la que ser crítico al Gobierno podía pagarse con la vida o el exilio.