pandemia

Epidemia mundial. No hace falta aclarar los males que puede ocasionar una peste planetaria, que de eso se trata la pandemia. Es hora también de analizar los efectos positivos del asunto, sobre todo en términos políticos y del rédito que puede sacar un gobierno de esto para fortalecer su capital político. Por un lado, al tratarse de un fenómeno global, cualquier gobierno queda exento de responsabilidades, pues siempre habrá en el mundo algún gobernante que esté haciendo las cosas peor. Por otra parte, al ser muy delgado el límite entre la responsabilidad de una conducción nacional y la de una catástrofe mundial, todo error local se licúa. Esto produce efectos rarísimos, como el hecho de que, en la Argentina, la mayoría de los sectores progresistas de la población naturalicen la celebración del Día de la Memoria sin poder salir a la calle y con los patrulleros y la Gendarmería custodiando los barrios. Nunca un 24 de Marzo fue tan parecido al de 1976 desde la recuperación democrática. Sin embargo, nadie salió a cuestionarse eso ni siquiera por un momento.